Esta obra parte del presupuesto de que el Derecho Constitucional permite la crítica del Derecho desde el Derecho mismo porque la Constitución, sobre todo, contiene normas que rigen la producción de normas, tanto a nivel formal o procesal como a nivel sustancial o de contenido. De ahí que el libro toma la Constitución en serio y no es permeado por el escepticismo de quienes invalidan la Constitución a partir de prácticas políticas o sociales. El Derecho Constitucional debe construir puentes entre la normatividad y la facticidad que acerquen las prácticas de instituciones, autoridades y ciudadanos a los preceptos constitucionales y que permitan revisar estos preceptos a la luz de estas prácticas